“Secreto en la montaña” es un largometraje dirigido por Ang Lee que nos
lleva al año 1963 en pleno Signal (Wyoming), pueblo en el que dos jóvenes,
Ennis Del Mar y Jack Twist (Heath Ledger/ Jake Gyllenhaal) se encuentran
de casualidad al buscar trabajo.
Se
les encomienda ir juntos a Brokeback Mountain a cumplir con la tarea, pero no
todo es tan fácil de hacer cuando se forja una relación que tienen que
esconder.
Luego
el destino y la suerte los separa y ellos hacen sus propias vidas con esposas e
hijos. Sin embargo se frecuentan de tanto en tanto entendiendo que serían
vistos con malos ojos a donde fueran.
Lo
importante de este film es que recalca muy bien las nociones de infidelidad,
homosexualidad y confianza, además de resaltar la conciencia por parte de los
personajes. En una sociedad como la de ahora, en la que estamos tan habituados
a ver lesbianas y gays todo el tiempo, tomándose como algo normal, ésta
película nos remonta a la mentalidad no sólo de estos dos jóvenes, sino a la de
una población que castiga la homosexualidad con la muerte (los vaqueros mataban
a golpes a aquel que le gustara una persona de su mismo sexo).
Esto
nos lleva a preguntarnos acerca de la psicología de la gente. ¿Cómo es posible
que pueda alguien callar una verdad de ésta magnitud por tanto tiempo y formar
una familia como si nada, sabiendo que no es feliz? Más allá de los prejuicios
injustos de aquella y de esta época, eso no tendría que suceder.
Este
film refleja un amor tan fuerte entre dos hombres que traspasa las barreras de lo
imaginado, haciendo que sintamos una cierta compasión (o comprensión) acerca de
la situación y aun así emocionarnos.
Creo
que ésta película es capaz de llegarle a aquellas personas que están muy
reacias a la temática de la homosexualidad, creando un ambiente perfecto para
un típico romance: la montaña, una carpa, el frío, la lluvia, etc.
Una
obra maestra con originalidad, calidez, controversia pero muy emotiva y
reflexiva para toda clase de público, pero apta para mayores de 16 años.
Para
la realización de ésta película destaco que no fue necesario en ningún momento
contar con escenas pornográficas ni mucho menos, sólo hay “indicios” de la
temática y se da todo por sobreentendido, y para ello en fundamental la
expresión y transmisión como aspectos sobresalientes en este caso.
Como
es de esperarse, no hay un final feliz, pero disfrutamos de una intensa
reflexión y mucha carga emotiva en el desenlace. Alguna que otra lágrima se
puede llegar a caer.
Por
último, hay algo que llama mucho la atención: Ennis y Jack son completamente
distintos. Uno es parco, recio, frío y distante. El otro por el contrario, es
el hombre más tierno que una película puede tener. Sin embargo, estas dos
personas verán sus vidas entrelazadas tan profundamente que ni ellos sabrán
cómo zafarse.
Es
un “grito de auxilio”, como suelen decir algunos.
Dato curioso:
Esta película fue nominada al Oscar a Mejor Director, Mejor Guión, Mejor Film y
Mejor canción original, la cual es de un autor argentino exitoso radicado en
los Estados Unidos: Gustavo Santaolalla. Se destaca por demás la
fotografía.
---
SI ---
No hay comentarios:
Publicar un comentario